Mientras la barca se hace silueta entre sombras, se ribetea mi perfil de capitán pobre.

Llevo una alforja de sueños coleccionados, un poncho hilado con recuerdos bloqueados y un zamarro liso que acaba en mis pies descalzos.

El báculo que empuja la barca, es el mismo que me sostiene en pie, por eso voy más lento, más ansioso por volverte a ver.

Cuando abro el mapa del universo que cargué escondido bajo el sayo, junto estrellas, amarro constelaciones coquetas y retiro mi mano lenta, sorprendida de sí misma al ver el camino.

Como norte tu mirada, como guía el destello de tu boca y como faro la luz de tus mejillas blancas.

El surco que dejo se deshace en el agua, y mientras suspiró la esperanza de tu recuerdo, mi amigo el viento, me trae tu aliento con el menaje de tus brazos abiertos.

Juan Javier Chacón

30.05.2020

Llevo una alforja de sueños coleccionados, un poncho hilado con recuerdos bloqueados y un zamarro liso que acaba en mis pies descalzos.